Gofios al hilo de lo posible
Por Antonio Domínguez |
DE LOS SUBLIMES
1) No abundan en Canarias los comegofios empeñados en pronunciar
las ces y las zetas. Todo hombre listo sabe que esos matices son imposibles de
dominar por el isleño, de adulto, que ya
pasó de la niñez y primera jodentud, al final de la cual decía jacha,
jigo y jiguera. No obstante, que yo conozca hay un político y un
presentador-reportero penando porque no se les escape una ese donde va una ce o
una zeta. Omiten las eses finales que es un deleite, por imposibles para ellos
¡y para mí!
¿Habrá cosa más linda que ver a esa Carolina Darias, preocupada
por pronunciar todo con ese clarísima?, sin ambigüedad de dejar arrastrar una
especie de ce entre la ese y la ce; por ejemplo en la palabra plaza, ella que
sabe que un canario no es de Valladolid, remarca la ese con fuerza; es, por lo
que la pongo de ejemplo. Valoro todo lo que es esta mujer para el parlamento:
sus nervios templados, su voz, su tono, su talante, etc.
¿Habrá cosa más horrible, que ser de las “Escarabaneras” e ir
ceceando y tartamudeando por la vida después de la alta pubertad? Con dejo
canario intentar hablar español sí pero con ese dejo intentar hablar castellano
es tan absurdo como trajear a una culebra y ponerle sombrero además. Tan
imposible como llegar de margullo al fondo de la gran sima del Pacífico océano;
es tan feo y tropezante como el peine de un perro. Se reduce todo a quedar con
el .… Al aire.
DE LOS DOCTOS
2) El presidente de Canarias, prometió dos veces, que como mínimo
le quedaba a Canarias que soportar un plus de mil cuatrocientos sesenta y un
días: de los del señor (padre Dios). Se refería seguramente a la periferia de
la hegemonía Teide-Atlántica. El presidente del cabildo de aquí manso como una
cabra, especialmente mansa, tira abajo el pleito insular o, síndrome Bravo de
Laguna.
Gran Canaria nunca llegó a tiempo. Cuando tenemos un excelente
abogado del estado cogiendo por la pechera al gran Tinerfe, le perdemos y nos
llega un alcalde. No sé lo que es, pero por como “resopla” me da que es
maestrucho de plan antiguo, de esos de las cuatro reglas y otro pisquito
pellizco. Es de suponer y supongo.
No sé de donde consio resuma la fama de este Morales gestor de
ayuntamiento “rico”; si fuera listo, tendría que saber que el gobierno está
allá y que cuanto vaya a conseguir con astucia o juegos de manos
(prestidigitaciones), los amos de Canarias; la patrona de Canarias; el mejor
clima de Canarias; la montaña más grande de Canarias; la isla con diez
reactores oncológicos de Canarias; la isla con su televisión en Canarias… toda esa
gran “continental” isla en Canarias se meará de la risa con la educación; con
la condescendencia; con el melifluo dulcísimo estilo; con la pusilánime postura
y talante del gracias y por favor. Si no el pleito, sí hay que expresar la
disconformidad con quienes nos gobiernan y manejan (que viene de manejar) el
presupuesto.
¡¡Bravo de Laguna!!... no pudo ser. A pesar de todo ¡¡¡OLE!!! Tus
rozones rozantes colgones atomatados, calabacínicos, aguacatiles, mameyiles,
papayíles, etc. a mi no me interesa la población, porque nada le voy a pedir;
hablo por mí. Te tendré siempre presente. Te expreso las gracias que pudieran
llegar a la más ignota altura; por haberte posicionado macho ante el menor
tejemaneje.
DE LOS SITE SELLOS (O: LA CANCIÓN “SÍ Y AMÉN”)
3) Echamos de menos a Don Paulino. Cuando se ponían en juego los
intereses de Tenerife (a los que él llamó siempre los intereses de Canarias) se
agarraba a peliar a la trompá hasta con el gigante Goliat y sus tres hermanos
(del gigante). Al que no vertieron, con cierto amago de angustia y de vaciedad
por mi parte, fue al señor Barragán. Portavoz no puede ser cualquiera.
Presidente del gobierno puede serlo cualquiera porque tiene un pelotón de
técnicos que le gestionan el mando; los consejeros lo mismo; y presidente de la
cámara, nada más decir, que lo fue Castro Cordobés. Ahora bien. No se puede suplir (no hay nadie para suplir) la oratoria artística, elegante,
como bella canción al oído, que se gana al pueblo; esa es la del señor
Barragán.
Cuando viene expresada por material desangelada, desacelerada, sin
alma; de datos y de frases más vistas
que un TBO; construcciones lingues para que el pueblo se las coma ¡y están muy
bien! pero sin desabrimiento porque hasta las vacas aman la sal. Pronunciada
fue la disertación con temblequeo vibratorio y miedo escénico, tanto, que
cuando terminó estaba amarillo como raro atardecer en la Aldea de San Nicolás;
raros colores de los cielos del verano. No lo tome a mal señor consejero portavoz, todos los demás son
peores. Aquel desinhibido, el de los
chistes y cortos pareos poéticos malísimos; era el más malo de todos. Tenía
fortaleza muscular y su piel también fuerte forjada a saber con que material de
entrada antifricción en la atmosfera; ¡¡un titán!!
Sea natural; no intente competir, si se empeña en eso le auguro un
porvenir nefasto y funesto conducente al ridículo. Solo hay uno
en los 100 metros lisos; solo hay
uno en el salto de altura; solo hay uno que la tiene más grande (aunque solo
sea un centímetro. Yo soy de los que dicen que pesadas en una báscula son todas
iguales. Si falla la longitud viene el grosor y viceversa. El tal viceversa
rarísima vez falla). Como sé que tiene oídos para oír, le ruego que escuche
(esto ya es para todos) con un presidente desangelado, que ni es agua de arroz
ni compongo de limón; un portavoz sin garra; un gobierno compuesto por los
peores del anterior y los nuevos fichajes con ojos reventones quietos parados
impávidos; con los oídos atentos al vuelo de una mosca: unos en el guindo y
otros en la jiguera. Sin saber ni como rayos llegaron allí. Por ello creo que
se acerca la hora de Gran Canaria. ¡Claro! Falta nada más y nada menos que soportar y cumplir la amenaza de los mil
cuatrocientos y pico días; la cual sentenció el presidente con voz flojita pero
con tal seguridad –consio- que me dejó helado; con esa mirada agachada de abajo
pá arriba: a lo Juan Wayne.
LA FIESTA DEL ASNO
4) No soy animalista ni amante de los animales, tanto es así, que
no hay uno que se despache en carnicería, que yo no me coma de cualquiera de
ellos el medio kilo largo. Sí me considero humanista a favor de las personas;
por eso pido se prohíban las carreras de toros en medio del gentío. Ya una vez
les llamé salvajes y atrasados cavernícolas. También me despachaba a gusto con
los cuidadores de San Fermín. Me queda decirles que son unos mentirosos (a ver
como les quedaría la fiesta si el
público se enterara en que condiciones están los heridos de días anteriores) y
ustedes diciendo que son leves, los que van derechos a silla de ruedas; se les
pone la cosa muy fea cuando se les muere un joven que solo tenía magulladuras ¡¡chiquitas magulladuras!!
Presuntamente y supuestamente.
A ustedes y a San Fermín se les pone la cosa dura cuando un toro
vacía de tripas a un joven en el callejón. Los que pierden una pierna, un
brazo, los de las sillas de ruedas; los de los golpetazos, quedando ciegos,
sordos, mudos; los que le parten el bazo, el riñón o, mueren al cabo del tiempo
con el hígado desmigajado. Supuesta y presuntamente.
¡Mira! Alcalde de Pamplona, que eres tan inoperante como San
Fermín que prevalece quieto como madero en hornacina; por descontado, al margen
de la vida. No te lo deseo; pero puede que algún día te traigan un familiar
querido con los pies por delante. Piénsalo. Vuelvo a insistir si les pasa algo
puesto que están jugando con la muerte, para mí no miren; que bien sabe la
naturaleza y todo el que me conoce, que yo, jamás he deseado mal a nadie, todo
lo contrario, me aventuro a enfrentarme y a lo que sea, aunque sea por evitar
un solo aplastamiento por toro, tan natural ¡¡… que joderse!! En esa salvajada
cita en Pamplona. ¡Ya usted ve! A mí ni fu ni fa, las corridas de toros en una
plaza con toreros profesionales. No me meto en ningún negocio donde los sin
número posibles toletes estén a salvo con la vida. En la plaza se enfrentan dos
seres; uno inteligentemente y ex profeso dirigido a quitarle la vida al otro
que se defiende por instinto. Yo no puedo decir que me alegro cuando muere el
torero, pero sí puedo decir que me es indiferente. Por mi parte, adelante con
los toros en las plazas, no tengo más que decir.
El mundo civilizado se ríe de nosotros y de nuestras payasadas.
Los payasos que allá también hay con Hemingwey a la cabeza, que fuera rey de
ese mambo, vienen a reventar a España los poquitos virgos que le quedan y a
poner todo perdido.
Si siguen los aplastamientos y la muerte en los callejones,
valdrás lo que vale alcahuete de mercado de artículo diario: nada; si cortas
con esa vaina pasarás a plena historia sabia del mundo fino; como le pasó
Abraham Lincoln, por la suelta de los negros. Tú por no soltarle los toros a la
gente en el estrecho, en el negro y resbaladizo callejón.
DEL DESAMOR AL PRÓJIMO
5) Primero decir del pueblo español que se tira a cifras y letras
y se ventila a todos los sálvanos diarios: de pera, de manzana y naranja.
Españoles que han trabajado, malcomido, sin educar, sin conocer oficio
afilándose de barrigas por esa península ibérica, cogiendo filo en toda piedra
¡¡y los canarios!! Igual. Grecia, la tierra de Platón y la jarca, no tiene mas
méritos que ninguna tierra hoy; ¡como me desencantó el parecido físico con
nosotros¡. Había allí unas mujeres que eran “iguales” a las hermanas de mi
madre; vi hombres que sus cráneos y acciones les tenemos aquí. Quiero decir,
que los pueblos son estúpidos en todas partes, que hacen lo que dicen los kikos
de la tele o los lelos del chiringuito de jugones, sin más desperdicio.
España es un pueblo que roba y mucho. Yo era barbero y cuando
había prisa le robaba cinco minutos a un servicio, por lo que no podía
desplegar todo mi saber y así es como robaba yo. Robaba fruta de pequeño y
todas las que comí las robé porque no eran mías y no las pedí. En algunos bares
se roba con adulteraciones de comidas o bebidas; otros no poniendo cuidado
profesional en la limpieza de los vasos. Se roba dejando aprendices solos en
prácticas quirúrgicas en las cuales y por las cuales ha ido gente con papá Dios
supuestamente. Roba el docente. Tan solo en el tener alumnos preferidos ya se
comete una estafa-robo al resto de la clase. Son tantas las formas de robar a
la buena voluntad que tiene la mala voluntad, que se puede decir que son todas
las formas.
La totalidad de los ejemplos anteriores es para hacer colegir que
roba el chico roba el grande y el medio pensionista (siento tener que aclarar
–usted entiende pero no todos- que no se trata solo de dinero que son los robos
también éticos estéticos y hasta filosóficos incurriendo en todos los
espectros). Por todo lo dicho, ¡la pregunta de las mil pesetas! Es: ¿Porqué se
le tira encima a Isabel Pantoja la España que educó el generalísimo, caudillo
por la gracia de Dios?, de los San Fermines, de las telenovelas, del penarte y
la madre que los alumbró. La España cuervo, buitre, perro de las praderas,
perros australianos, diablos de Tasmania; todo eso son quienes instalados en
salvajada atroz se portan como caníbales y fóbicos bárbaros. ¿Y eso porqué?
Porque a cualquier persona que sufre en una cárcel hay que desearle lo mejor.
Aunque sea la única que tiene trato de favor hay que alegrarse por ese ser, lo
otro es ser cretino y muy mala persona; mal educada que es peor.
Claro que no se puede dar trato de favor a maleantes, bandidos,
facinerosos, bribones, granujas mal encarados y feos, rojos y repulsivos, como
el peine de un perro. Pero a Isabel Pantoja que se ha quitado la vida en giras
y cantándonos propiamente para hacernos felices; una mujer de esas no debe ir a
la cárcel por cuatro perras, eso no es delito considerando que están sueltos los
que se han llevado más de siete pesetas; máxime que Jesús murió entre ladrones
y le dijo a uno: “en verdad hoy mismo estarás conmigo en el paraíso” Jesús dio
a entender que los bienes de la tierra son para el primero que anda para
servirse, pero, sin atrincherarse; ¡¡a atesorar se ha dicho!!. Con ese gesto
sacó esa acción de la ristra de pecados ¡¡¡y ya usted ve, sin embargo es un
delito de aquí te espero, que te encierra, para que pierdas el bronceado
playero!!!
Si está demostrado que el propio mundo es un robo; ¿a que
privarnos por ello de una gran cantante?; nos
la entregarán medio muerta. Tú Isabel mucha paciencia y mucho ánimo.
Ensaya mucho, para el que te quiera escuchar, que pague el espectáculo mas caro
de España: y encima –entonces sí- te aplaudirán.
Este pueblo culebrero a víbora-tendiente, carroñero, ignorante,
pelotero y romeríl, que se alegra de las calamidades que sufre la infanta. ¿Qué
es eso de hacer “arder en plaza pública” a una grande de España, un país, en el
que no se mete en la cárcel a los golfos y a los cuidadores de San Fermín que
echan a pobres diablos a correr en estrecho callejón mixturados, en medio, de
una manada de toros bravos, para después con inmenso sadismo bestial y perverso
dar el parte de los diez o quince heridos graves –ya que mienten, como
corresponde a semejantes tipejos- diciendo que son todos ellos leves) por
aplastamientos, cogidas y muertos cuando los hay?
La justicia tiene sus propios tribunales en el vaticano ¡y que no
se crea nadie que eso es cosa de juego! Ahí “”se desolla”” vivo al que ponga en
riesgo el chiringo. ¿Porqué tiene la realeza que pasar por el centro de una
cuadrilla de alcahuetes, chivatos con
licencia universitaria? Ellos se dicen llamar informadores. ¡¡Que horrible debe
ser para un grande tener en la nuca el
vaho de los correveidile, cuando huye a los interiores de los juzgados!! Hay
que arreglar las cosas para que la gente de palacio sea juzgada en palacio;
duramente, como en el vaticano, pero sin prensa del corazón, ni del hígado, ni
del riñón. Cobardes, juegan con estos “indefensos muchachos” Felipe y Leticia
abusan de su infinita educación y de que están totalmente ajenos, incluso, a
pequeñas maldades; ah si pudiera darse
la resurrección de los reyes católicos, para que los capara a todos y les
pusiera en un velero encantado –para la eternidad- en la ruta de Cuba.
Hay que acabar la carnicería (de carnaza) ¡¡justicia sí, y total!!
Pero de puertas adentro en los palacios para la familia real. Una equivocación
o falta-delito no puede poner a una infanta en menos carne que un telegrama
urgente y en más huesos que un saco de nísperos o níspolas (auténtica vergüenza
me da pertenecer a este pueblo perseguidor de la desgracia ajena; propiciadores
inductores del al galope a la caza del zorro son los “cazadores” al tropel con
título universitario de indomesticable brutalidad bárbara con el desvalido, o,
en su defecto cronista y rebatidor deportivo que debería ser –creo que lo es-
vergonzante-vergonzoso hasta para el que sienta la vergüenza ajena. Presuntamente).
A una o un infante hay que ayudarle protegiéndole de la escoria periodiquil, si
no sería del mundo con más sufrimiento que agricultora de minifundio ¡¡yo digo
que no tiene lógica!! De hecho a las dos las diferencia ya, su solo título.
Siendo el delito el mismo, son distintas las personas que lo cometen. Sí porque
una resbala con cinco duros y nadie se entera (no interesa a “los
informadores”) y puede rehacer su vida en otro pueblo como persona de honor; y
otra resbala con cinco duros y le tronchan la vida “los informadores”. Si no se
trasplanta la cara no podrá vivir tranquilo en ningún punto de la bola mundo.
No hay cien metros cuadrados en que no esté instalada tal y nauseabunda plaga.
Protección a la infanta ya. Diga lo que diga este pueblo de cretinez estúpida.
¡¡Ya es hora de que pueda vivir ella y los niñitos, sus hijitos!! El viejo
estuvo mal aconsejado, por no haber puesto cara de mala leche reflejada en la
ley. Meter periodistas en los despachos de los palacios a hacer preguntas una
vez al año no hace daño, pero de continuo es locura. Que le pregunten a la
sabia Sofía, que a pesar de su docticidad general en trucos de la vida se la
jugó una tal… sin tal; amante del dinero y echó la cuenta: 50.000 libros a 50
euros son dos millones quinientos mil euros. Ya hemos visto como el propio
mundo es un robo y como Cristo subió al cielo dando la mano a un ladrón.
Sugerencia. Es mucho mejor para un rey, instalarse un par de
aguacates de Mogán en el arco ánglico-ínglico, que permitir que le cuenten los
helados que toma y las veces que mea. Ya que están rodeados de metralla que no
les respeta, hagan una ley de la monarquía que siendo dura, (mano dura dentro
de un orden, el cual no deben ceder a nadie… ese orden será el de ustedes. No
hacer nada. Esperar maravillas de buena gestión de funcionarios sin estar
vigilados, ha echado a andar en peregrinaje forzoso por el mundo, a montañas de
familias reales a través de la historia) dé cumplida cuenta para con ustedes de
los excesos del pueblo y no se pueda insultar gratis u opinar sin tener ni
magdalena idea; tienen que blindarse para las cosas que hacen daño; y de lo demás cuanto mas los escribientes a
sueldo, hablan, menos mean. Tienen que aspirar a poder, poder; pero ¡ya! antes
de que sea demasiado pronto. ¡¡¡Si no, para que sirve ser rey!!! ¿Para que haya
alcahuetes especializados en vituperar y echar abajo la casa real? ¿Para sin
vivir esperando a ver qué va a decir el insaciable enredador? Así no puede
vivir nadie y muchísimo menos un rey y reina. Hay que dar un poquito de vara al
legislador (que para eso está) para que afine la ley sin que dé lugar a quejas
por censura. A un pueblo mil leches como el español no se le puede decir que la
justicia es igual para todos porque lo entenderá tal cual y literal. Lo inteligente
es no pronunciarse abiertamente ante todo tipo de toletes y muchísimo menos
ante “los informadores”. Si esto lo sé yo no es lícito que lo ignore persona
arriba.
Sentencia: un tipo que en
Cataluña es soberanista, independentista, pendenciero político, estratega de la
traición constitucional etc. conspirador contra la monarquía, propiciador de
quema de banderas, inductor de algaradas callejeras, etc. si un tipo con estas “virtudes” puede meterse
por el palacio para adentro con cara ¡¡durísima!! Alegre y jovial a reírse del
rey y a decir que viene en son de paz y el rey ante todo ese
atropellante-revolcador improperio republicanil y esa orfandad a que quiere
Arturo llevar por sus mameyes independientiles, no pueda dirigirle a la cárcel
automáticamente, es que la monarquía está en el aire, porque rey que no manda,
es rey que está de paso. Como tiene dicho Nietzsche: si vas con mujeres no
olvides el látigo. Las posturas caprichosas y femeninas del pueblo se arreglan
1)con mano dura primero; por si acaso en el bla bla bla se rompa
el país
2)con la constitución más tarde; cuando ya estén en la cárcel los
Juárez, los Panchos Villa, los Bolíbar, los Castro, Franco-Carrero… los de los
golpes de mano (ellos se hacen llamar demócratas), reencarnados en los políticos
catalanes.
Comentarios