¡Mi director, mi amigo, Antonio Godoy Sosa!
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| Antonio Godoy de niño |
“Para fortalecer mi convicción y apuntalar mi
voluntad me centré en lo que estimé que era más determinante: el
silencio” (Pablo d'Ors: Biografía del Silencio)
Trabajador
incansable con poderosa capacidad intelectual, silencioso, has hecho
en estos últimos meses que aprendiera a valorar el silencio como
algo maravilloso. Además, has sido un ejemplo de valentía sin una
queja. Gracias por haber compartido tus enseñanzas que son un tesoro
para que todo sea más fácil, sin obstáculos. Últimamente decías:
“¡Teresa, vive tu vida!”con esas miradas llenas de emociones y
ganas de vivir, aunque de tu ojo derecho se desprendiera una lágrima
silenciosa. ¡Manifestaste gran fortaleza, respeto, bondad y
discreción!
Amigo, he sabido lo que es la amistad para siempre.
“La
verdadera amistad llega cuando el silencio entre dos parece ameno”
(Erasmo de Rotterdam).
Pero debo decirte: me esperaba que me acompañaras en mi
despedida de la enseñanza para poder celebrar habernos conocido.
¡Cuánto daría por unos ratos como los vividos!
“
¡Teresa!- me decías- ¿Qué problema hay?”.
Gracias.
Teresa Novoa Viñuela
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