La fe
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| Por Luis C. García Correa y Gómez |
“¡Encontrar la fe es haber hallado y encontrado el manantial que alimenta y fortalece todos los valores de la vida!”
Sin fe no se creen en la Humanidad ni en Padre Dios.
La fe mueve todos los obstáculos que impiden la felicidad.
Sin fe no se cree en la Amistad.
Perder la fe es entrar en el laberinto de la desigualdad, y de la interpretación entre el ser y no ser, y entre el haber y tener.
La fe mueve y quita las montañas de la incomprensión, de la insolidaridad, de los valores eternos y de la falta de amor y amistad.
“¡¡¡La cordillera de la vida se cruza con felicidad, libertad y facilidad si se tiene la brújula de la fe que indica el camino seguro y verdadero!!!”
“¡Vivir sin la fe es caminar ciego por los precipicios de la falta de creencias que debemos tener para una vida normal!”
El horizonte del bien se otea, divisa, se alcanza y se consigue con la ayuda inestimable y necesaria de la fe si reservas.
“¡¡¡La fe es creer en Padre Dios y en los demás para ayudar!!!”
El páramo del desaliento lo fomenta, desarrolla y hasta acrecienta la falta de la fe sin obras.
“¡La fe mueve todos los obstáculos que impiden la felicidad y aumentar la libertad!”
La libertad se puede tener sin tener la fe, pero con un vacío difícil de llenar.
“¡Benditos y alabados sean lo que tienen fe operativa. Ellos tienen el fruto de la honestidad y nos pone en el camino de la santidad!”
“¡El camino de la santidad se recorre cuando con fe se ve el horizonte al que debemos llegar para gozar de la plena felicidad!”
Sin fe es muy difícil tener y compartir la felicidad.
La soledad es la ausencia de la fe operativa y efectiva, que nos hace tropezar y caminar sin fe, confundiendo la realidad.
“¡Caminar sin fe se corre el riego de caer en las redes del mal!”
El mal se desarrolla y crece en el cimiento del descuido y despreocupación por falta de fe operativa.
El mal acecha, constantemente – es su meta, es su fin a alcanzar – para quitar la fe y adueñarse de quien pueda y de los demás débiles o que no tienen fe.
“¡¡¡La fe es un don divino difícil de alcanzar si no se reza sin descansar y no se duda de su utilidad y necesidad!!!”
La oración y el sacrificio son el camino recto y seguro para alcanzar la fe. Se sea creyente o no.
Con perder la fe se pierde el sentido y la orientación que le debemos dar a la vida para conseguir la felicidad y la libertad.
“¡Perder la fe es entrar en el laberinto enredado, efectivo y controlado por el mal!”
Roguemos por tener mucha fe para compartirla con lo demás, y ayudar a que el mundo y la humanidad vivan la plena felicidad.
“¡¡¡La fe es el bálsamo que cura las heridas del pecado!!!”
Recemos con fe y alcanzaremos lo que necesitamos para juntos compartir la felicidad y la libertad camino de la santidad.
La santidad es vivir con la fe, operativa, activa, y en plenitud de actuar con el AMOR Y LA AMISTAD y la honestidad, que al compartirlas vivimos la plena felicidad
Bendito y alabados sean los afortunados que viven con fe, porque llegarán al destino de la vida: la contemplación de Padre Dios.
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