“El Gobierno desde las sillas”
Domingo M. Guerra Hernández |
Hoy vuelvo a
coger mi vieja pluma, aquella que me servía de inspiración, para comentar los
graves atropellos que veía que se cometían desde el poder.
Me veo obligado
a recurrir a ella nuevamente para hacer honor aquel sabio refrán de “poderoso caballero don dinero”, puesto
que en nuestro pueblo de Tenoya, se está viendo afectado también por ésta
plaga, permítanme utilizar este símil, con la nefasta gestión que se está
llevando a cabo por parte del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria
respecto a la construcción, en pleno casco antiguo de nuestro pueblo, de un
biodigestor.
No es la primera
vez que la capital altera su historia, también en 1940 tras anexionarse
ilegalmente San Lorenzo, solicitó y cambió su nombre, con el beneplácito del
Cabildo de Gran Canaria, su nombre de Las Palmas por el de Las Palmas de Gran
Canaria. Esa es otra historia, pero hoy en día se siguen produciendo varios
cambios, en forma de atropellos a la ciudadanía y a su historia, con
nocturnidad y alevosía, como pasa con el problema del biodigestor,
para que se me entienda, crear otro “Salto del Negro” o depuradora como la de
Barranco Seco.
Ya que nadie
recuerda su pasado, haremos un poco de memoria a través de estas breves líneas.
Antes de ocupar las sillas de los grandes poderes, aquellos que decían “No
al gas natural”, se referían a que no, pero no en su municipio, ya que bien
se encargó el agüimense de poner trabas para que dicho mamotreto no fuese
construido en sus dominios. Sin embargo no importa que en el distrito V de la
capital grancanaria, allí donde mandamos todo lo que nos sobra y que no
queremos que se vea en “la gran ciudad” si se permite una instalación que no se
ajusta a su licencia y que perjudicará gravemente la salud y bienestar de los
vecinos. A mi modo de entender y el de muchos tenoyeros, lo que se están
haciendo con nosotros es una total y absoluta falta de respeto. Y al escribir estas
líneas no se crean que me faltan ganas de incitar a la rebelión, a la rebelión
creando un partido político al estilo de “Roque Aguayro”, para defender no sólo
el distrito V, sino también todo aquello que tenía que ver con el municipio de
San Lorenzo de Atamarasaid, tal y como nos animaron hacer, cuando fuimos a
darles una charla sobre el mismo en la sede de su partido. Hoy el personaje al
que aludo ocupa otro cargo que le obliga a tomar otras decisiones, es el Poder
del Sillón.
Pero sigamos con
los cambios que produce en las personas, el sillón del gran poder. Una de las
que me viene a la mente que están o han pasado por delante del “juro o prometo la constitución”, es uno
que en su día prometió que si salía de diputado a cortes dejaba su puesto de
concejal en el ayuntamiento, y que en las últimas elecciones vendió a la prensa
la creación de una tenencia de alcaldía para el “histórico municipio de San
Lorenzo”.
Mi memoria es
larga tanto que me lleva a recordar a una imberbe presidenta de una asociación de
vecinos del distrito VIII en aquellos tiempos, que pasó de llevar piedras al ayuntamiento
palmense a ser senadora, traicionando a aquellos que la ayudaron a llegar a
donde está ahora, y de pasar a llevar piedras en representación de los vecinos
que protestaban por las carencias en asfaltado en una zona deprimida de la
capital a convertirla en un barrio dormitorio y por supuesto a vivir en una de
las mejores zonas de la ciudad. De aquellos polvos estos lodos… y nunca mejor
dicho.
Pero continuemos
recordando del largo elenco corporativo y cómo hace cambiar el poder de la
gobernación a las personas. Tanto les hace cambiar, que hoy están luchando por
los derechos de los olvidados al imponer el ordeno y mando, pasando de defender
como buen izquierdista la memoria de D. Juan Negrín López a poner las mayores
cortapisas posibles para que los familiares recuperen los cadáveres de quienes
fueron fusilados.
También “el juro o prometo” la constitución ha
llevado a una persona que vendía libros y que defendía la recuperación de los
restos de la Sima de Jínamar y que incluso bendecía con su presencia la
presentación del libro “El Isleño Domingo Valencia” que prologó, a oponerse a
todo y pasar a prometer una constitución en la cual no puede creer por las
siglas que defiende, y aplicar un artículo
155 a lo caciquil a mí pueblo.
Todo esto señor
alcalde del Ayuntamiento de Las Palmas, es para recordarle que usted, también ha
jurado o prometido la constitución, aquella que nos hace iguales ante la ley y protege
a todos y quedó en volver para darle explicaciones a mi pueblo de los avances. Señor Augusto estamos esperando por esas
explicaciones, una persona se mide por su palabra, y ahora mismo la suya no es
creíble.
Por otro lado
decirle al Cabildo de Gran Canaria, que ¡menos mal que no tenemos Bienes de Interés
Cultural cerca de esta nueva instalación!. El propio Cabildo restauró hace años
la ermita de Nuestra Señora de la Encarnación del siglo XVIII, cuyos patrones
son la familia Lezcano, y que cuenta con una de las campanas más antiguas de la
isla. También contamos con la antigua casa del cura, del Trapiche azucarero que
también pertenece a la familia Lezcano, nombrado por varios investigadores como
Manuel Lobo.
Mientras enhebro
estas líneas pienso que yo, para dormir bien, necesito una conciencia tranquila
y le recuerdo señor alcalde que usted prometió que revisarían todas las
licencias y que estudiarían como cerrar esa instalación a todas luces
irregular. Obras son amores: en su visita a Tenoya le dije en su cara que reconocía
cuando me querían vender una cometa y que usted encima me la quería vender sin
hilo, y por sus acciones así me lo está demostrando. No ha venido a dar
explicaciones, renuevan licencias para que pongan un tendido eléctrico
vulnerando todas las normativas puesto que la están pasando cerca de las
canalizaciones de aguas tanto de abastos, como de riego sin pedir permiso a
nadie, y lo que es más grave en terrenos que son privados, ¿Le gustaría señor
alcalde, que yo entrara ahora a su casa y le hiciera una obra y me pusiera a vivir
dentro de ella?.
Un alcalde está
para defender el bien común y sí para usted el bien común es envenenar a las
personas, le suplico que haga honor a las siglas del partido que representa, (PSOE) Partido Socialista Obrero Español
y tanto usted como los demás partidos denominados de izquierda, se pongan de
parte del pueblo y no del dinero.
Un saludo y que
usted siga durmiendo bien, recordando a cuantas personas está envenenando cada
vez que uno de sus concejales firma un permiso o una autorización para que el
Biodigestor de Tenoya se ponga en marcha. En Tenoya habrá viviendo unas 2.000
personas ¿le dará sus remordimiento para aguantar tantos muertos?
Honren ustedes con
sus actos la memoria de todas aquellas personas que dejaron un día esta vida por defender la constitución que
en aquel momento se encontraba vigente, D. Eduardo Suárez, D. Fernando Egea, y
como no al alcalde del Municipio de San Lorenzo, D. Juan Santana Vega, así como
a todas aquellas personas que teniendo instrucción enseñaban a leer y a
escribir a los obreros en los campos de concentración.
HAY QUE VER COMO CAMBIA EL GOBIERNO DESDE LAS SILLAS
Comentarios