Hay maneras y maneras de reivindicar las ideas
Por: Esteban Gabriel Santana Cabrera |
Durante las semanas previas al Día del Pino, el Cabildo de Gran Canaria adecenta la Carretera de Tamaraceite a Teror, retirando pinocha y basura de los márgenes, pintando muros, etc... Cual fue mi sorpresa el otro día al pasar a la altura del Toscón y verme con dos pintadas que ponían "INDEPENDENCIA" en un muro recién pintado y que me hicieron reflexionar ante la multitd de pintadas, o mejor, gamberradas que inundan nuestras paredes públicas y privadas reivindicando ésto y aquéllo.
Está bien eso de tener sus ideas, incluso la de pedir la independencia de España y de Europa, que en los tiempos que corren igual hasta nos iría mejor. ¿Pero qué credibilidad pueden tener unos individuos que se dedican a realizar actos vandálicos, que es a lo que yo llamo las "pintadas", en lo que es de todos? ¿Ustedes creen que alguien puede hacer caso a personas que destrozan y afean nuestra isla, que por cierto, es de todos?
Dios nos libre si todos fuéramos a hacer lo mismo, si cada ciudadano de a pie intentara plasmar en una pintada callejera sus ideas políticas, religiosas o de lo que sea. Creo que hay otros medios donde reivindicar nuestras ideas y que a buen seguro serán más seguidas que en un triste muro de una carretera de nuestra isla.
Está bien eso de tener sus ideas, incluso la de pedir la independencia de España y de Europa, que en los tiempos que corren igual hasta nos iría mejor. ¿Pero qué credibilidad pueden tener unos individuos que se dedican a realizar actos vandálicos, que es a lo que yo llamo las "pintadas", en lo que es de todos? ¿Ustedes creen que alguien puede hacer caso a personas que destrozan y afean nuestra isla, que por cierto, es de todos?
Dios nos libre si todos fuéramos a hacer lo mismo, si cada ciudadano de a pie intentara plasmar en una pintada callejera sus ideas políticas, religiosas o de lo que sea. Creo que hay otros medios donde reivindicar nuestras ideas y que a buen seguro serán más seguidas que en un triste muro de una carretera de nuestra isla.
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Pedro Dominguez Herrera