150 Aniversario de la Policía Local de Las Palmas de GC


El pasado 31 de diciembre se celebró el 150 aniversario de la creación de la policía local de Las Palmas de GC. En principio fueron policías locales de Las Palmas como así se denominaba la ciudad. Fue después de 1939, tras la Guerra Civil y cuando Las Palmas se anexionó al Municipio de San Lorenzo, cuando los policías locales de este municipio se unen a los de Las Palmas y la ciudad pasa a denominarse Las Palmas de GC. Yo, que no tengo tantos años para recordar esos comienzos, sí que recuerdo a la policía local de mi barrio cuando todavía era un pueblo, cuyos números pertenecían al cuartelillo de Tamaraceite, y eran conocidos por todos los que por aquí habitaban. ¿Usted conoce el nombre de su policía de barrio? Seguro que no, y si lo conoce es un afortunado ya que hoy está uno y mañana está otro. Echo de menos cuando antiguamente uno llamaba a la policía local y enseguida estaba en el lugar de los hechos, y eso que no tenía grandes coches como ahora, y muchas veces venía caminando o corriendo y no se les caía la gorra, que más parecía una escupidera puesta del revés. Aquellos trajes blancos y aquellas chaquetas pesadas que dejaron un dicho para la posteridad "eres más gandul que la chaqueta un guardia". No había ni un borracho en la calle, ni pedigueños, ni sinvergüenzas que estuvieran tirados en la calle esperando hacer de las suyas. Cuando la gente salía en carnaval o en fiestas, siempre se iba con respeto por si aparecían los guardias. Si te cruzabas con alguno tenías que darle las buenas horas porque si no es que escondías algo. Los guardias, Juan Vargas y Juanito el de San Lorenzo, se paseaban por los callejones y si veían a alguno haciendo de las suyas podía terminar en el cuartelillo. Había otros guardias como Antonio el de El Zardo que hacía la vista gorda y te decía amablemente si te veía con alguna copa de más, "vete a tu casa a dormir la mona que como te volvamos a ver por aquí...." . Y por la noche estaban los serenos, que se encargaban de vigilar que nadie estuviera fuera de hora en su casa y podíamos dejar las puertas abiertas porque estábamos seguros de que no iba a pasar nada. Los guardias eran personajes carismáticos de nuestros barrios, siendo muy conocidos entre la gente como Blasito de Tenoya, Juan Vargas, Tomás, Nazareno, Dionisio, el sargento Nicolás, Juan Santos y el cabo Fernando, que vendía chorizos aunque estuviera de servicio. No pretendo que el tiempo vuelva atrás, ni nombrar a todos los que formaron este cuerpo pero espero que estas líneas sirvan para recordar a aquellos agentes de antes, para que podamos aprender de ellos y de sus mandos, y así vivir un poquito mejor.

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
¡Buenisimo tema Esteban! Y ¿Como sabes tú tanto del tema si eres un jovencito? Parece que fueras de mi generación! Yo nací en esa casita hoy pintada de rojo que está en el caminito ese frente al aparcamiento parroquial,¡mi querida casa! Te cuento que yo le tenía terror a Juanito Vargas, porque como era tan moreno y aquellos ojos con que te miraba y que creo que eran muy claros.Pues el coco para mi en casa era... ¡Qué viene Vargas! si no quería comer, si quería subir al borde de la carretera a ver pasar ¡los poquisimos coches que pasaban! Lo malo era que él estaba al tanto, y como me viese sola asomada tras el "murito" de la bajada y el llegase hasta la esquina de la acera, me hacía ese movimiento con su mano como decir, ¡te voy a dar una tortita! Yo volaba camino abajo.Luego al correr de los años resultó ser una persona entrañable,claro.
Creo que antes se respetaba mucho más que ahora, al menos en el barrio,también era más reducido y nos conociamos todos, es cierto que si ahora necesitas un policia no lo encuentras ni con lupa y si tienes que llamar para que vengan por algo puedes sentarte a esperar, yo también recuerdo eso de que corrían si había que correr, mano al sombrero y mano a la porra que se balanceaba cuando corrían ¡si señor!
Ahora le dices a alguien que le traes la policía y les da tiempo de poner todo en su sitio. Feliz año Esteban, tamién para todos los lectores de este blog.

Entradas populares