La "cuesta de septiembre" para los de siempre.

Parece que nos espera, a los de siempre, un mes en el que en vez de la cuesta de enero tendremos que soportar la cuesta de septiembre y donde habrá que "agarrarnos los pantalones" porque si nos descuidamos nos quedaremos con lo puesto. Al comienzo de curso y al ya sabido gasto que conlleva, le tenemos que unir que nuestro ayuntamiento capitalino nos va a subir otro impuesto. El aumento de la contribución como la conocemos los ciudadanos de a pie, fue aprobado por el Ayuntamiento, junto con otras tasas, a finales de 2009 con el fin de aplicarlo en el presente ejercicio y hacer frente a la pérdida de ingresos. Los vecinos de mi barrio, Tamaraceite, pagarán entre 28 y 42 euros más. Muchos de ellos se han construido su casa con el sudor de su frente y ahora están en el paro. Otros, jubilados, con una pensión mísera que no da ni para pagar el agua y la luz se las verán y se las desearán porque quitarle 40 euros a su pensión mínima será dejar de comer carne y pescado unos cuantos días del mes. Estos dos ejemplos que ocurren en mi barrio, pasa igual en otros de los barrios humildes de mi ciudad y que en vez de recibir "rosas" reciben "espinas". Y digo yo, ¿por qué no pagan más los barrios que reciben más? Aquellos barrios que le hayan arreglado las calles, le hayan puesto algún parque, adecentado las fachadas o algo similar por pequeño que sea...pues que paguen. Y el resto, como el mío, que no pague. ¿Por qué tenemos que pagar los "barrios de segunda" las obras que se hacen siempre a los mismos?