La pobreza, lo que hoy estamos viviendo
Ya no puedo despertar como antes
ni puedo dormir, ni andar
ni salir a la calle.
Donde quiera que esté
está presente la pobreza.
Cuando duermo
noto que debajo de la almohada
ya no hay ni guatas ni algodones
noto el paquete de la pobreza.
Cuando despierto
ya no abro los ojos como antes
porque en mi despertar
veo la pobreza
Cuando las necesidades de comer me llegan
noto un nudo en la garganta
sin poder comer como antes
porque en mi plato
se refleja la pobreza.
Cuando estoy en mi casa
no puedo escuchar el toque de la puerta
porque me toca la pobreza.
Cuando camino
no sé por dónde ir
para no ver la pobreza.
Hoy en este parque La Plazuela
no puedo levantar la cabeza
porque en cualquier banco
descansa y duerme la pobreza.
Al levantarme
me doy cuenta que cierro mis ojos.
doblo la cabeza
cambio el camino
para no ver la pobreza.
Acordándome cuando era niño
de aquéllo pobres que pedían.
Veo pasar el tiempo...
hoy pienso
que nací viendo la pobreza.
Y sin saberlo
puedo morir en la miseria
pero hasta el día de hoy
en mi casa, en la trastienda
no he vivido la pobreza
agachando la cabeza
sin saber qué hacer.
Por Tino Torón |
ni salir a la calle.
Donde quiera que esté
está presente la pobreza.
Cuando duermo
noto que debajo de la almohada
ya no hay ni guatas ni algodones
noto el paquete de la pobreza.
Cuando despierto
ya no abro los ojos como antes
porque en mi despertar
veo la pobreza
Cuando las necesidades de comer me llegan
noto un nudo en la garganta
sin poder comer como antes
porque en mi plato
se refleja la pobreza.
Cuando estoy en mi casa
no puedo escuchar el toque de la puerta
porque me toca la pobreza.
Cuando camino
no sé por dónde ir
para no ver la pobreza.
Hoy en este parque La Plazuela
no puedo levantar la cabeza
porque en cualquier banco
descansa y duerme la pobreza.
Al levantarme
me doy cuenta que cierro mis ojos.
doblo la cabeza
cambio el camino
para no ver la pobreza.
Acordándome cuando era niño
de aquéllo pobres que pedían.
Veo pasar el tiempo...
hoy pienso
que nací viendo la pobreza.
Y sin saberlo
puedo morir en la miseria
pero hasta el día de hoy
en mi casa, en la trastienda
no he vivido la pobreza
agachando la cabeza
sin saber qué hacer.
Comentarios
Te conozco y se tu capacidad sobre todo de lectura.
Un saludo