MI REGALO DE REYES, CON DEVOCIÓN Y ADMIRACIÓN.

Por Luis C.García Correa

La humanidad se ha enriquecido, humanizado y perfeccionado con la actividad, magisterio y palabra del Papa Francisco.

“¡Los Papas ocupan un lugar jamás llenado!” “¡Y Su Santidad el Papa Francisco lo ha rebosado!”
“¡Bendito y alabado sea el Papa Francisco que con su ejemplo, palabra, acciones y oraciones nos acerca a Padre Dios!”

“¡La humanidad del Papa Francisco se diviniza por sus virtudes, hechos y palabras que inundan al mundo del bien y nos apartan del mal!”

“¡Seguir al Papa Francisco es estar en el camino de la santidad!”

¿Cómo agradecer a Padre Dios el Papa que nos ha dispensado? Rezando sin cesar y pidiendo por su Santidad.

Los Papas ocupan unos espacios sociales y mundiales, que no hay quien los ocupe porque son bendiciones de Padre Dios para el gozo y disfrute de la humanidad entera. Creyentes o no.

“¡La predicación del Papa Francisco no tiene fronteras!” Llega a todos los rincones menos esperados e imaginados.

Benditos y alabado sea el Papa Francisco, que siguiendo y acatando los mandatos y Mandamientos de Nuestro Señor Jesucristo Dios, nos indica y nos pone en el camino de la santidad.
“¡La santidad ha llegado, ahora nos toca a nosotros aprender y seguir los consejos y vivencias del Papa Francisco, y estamos en el camino de la santidad!”

“¡Bendito y alabado sea Nuestro Señor Jesucristo Dios que nos ha dado al Papa Francisco para que nos santifiquemos y alcancemos la eterna felicidad en Padre Dios, porque estamos en el camino que nos lleva a  la plena santidad!”

Gracias Padre Dios, Jesucristo Dios y el Espíritu Santo Dios, que nos han dado, para la gloria de la Santísima Trinidad, a un Papa que se llama Francisco, que nos imparte y enseña Sus Mandamientos para que seamos dignos hijos de Padre Dios y herederos de Su eterna gloria al morir en santidad.

“¡¡¡Bendito y alabado sea nuestro Papa Francisco, que sigue y pregona lo que le dice y nos dice PADRE DIOS!!!”

Creyentes o no.