El Gobierno avala el gran centro comercial de Tamaraceite


El Gobierno regional, a través de la Comisión de Ordenación del Territorio y Medio Ambiente de Canarias (Cotmac), dio el visto bueno a finales de octubre, y tras seis años y medio de tramitación, al Plan General de Ordenación (PGO) de Las Palmas de Gran Canaria. El Gobierno avala de esta forma un documento que ha protagonizado importantes polémicas como la de la construcción de las torres del Canódromo o la de un megacentro comercial en Tamaraceite Sur, proyectos que han sido cuestionados incluso en los tribunales de Justicia.
El documento aprobado  es la adaptación del PGO a la Ley de Directrices y a las leyes de Ordenación del Territorio y de Espacios Naturales, una tramitación durante la cual los dos últimos gobiernos municipales han aprovechado para introducir numerosas novedades en el planeamiento. Una de ellas es la devolución al PGO del Plan Especial del Canódromo (APR 09), una ordenación que el anterior gobierno local que presidía el socialista Jerónimo Saavedra sacó del mismo y dejó en el limbo por considerar que estaba pendiente de resolución judicial. Esta decisión no fue aceptada por la Cotmac, que requirió al Ayuntamiento para que ordenase la parcela de una u otra forma. Finalmente, y tras pronunciarse el Tribunal Supremo y el TSJC por su legalidad, el gobierno que ahora dirige Juan José Cardona (PP) lo reenvió a ese organismo público tal y como se había proyectado hace diez años, proyecto original que fue denunciado por los vecinos y aún está por resolverse en el Tribunal Supremo.
"Planes como el del Canódromo se analizaron en su momento cómo venía, se comprobó que era correcto y no se cuestionó más", aclaró ayer el consejero de Política Territorial del Gobierno canario, Domingo Berriel. El consejero descartó además reparos de última hora en otros planes polémicos como el del Estadio Insular o Tamaraceite Sur. "Todos estos proyectos venían de acuerdo a la norma, y de todas formas hay que tener en cuenta que la Cotmac no entra en disquisiciones de oportunidad, sólo se analizan las cuestiones de oportunidad que tienen que ver con competencias supramunicipales o incluso suprainsulares, cosa que aquí no pasa", explicó Berriel, "de resto lo único que se mira es que esté todo acorde con la legalidad".
Berriel recordó que esta tramitación comenzó en febrero de 2006 y que tras varias aprobaciones iniciales (en 2009 y 2010), por fin se logra cerrar este ciclo de seis años y medio. El Gobierno también aclaró que en el último mes de tramitación se introdujeron en el PGO algunas puntualizaciones de carácter técnico sin mayor trascendencia, ya que el Ayuntamiento aprobó en septiembre las últimas 200 correcciones requeridas por la Cotmac para darle el visto bueno al planeamiento. "En este punto hay que agradecer el esfuerzo del Ayuntamiento porque no hubo que devolver ningún documento ni hacer una aprobación parcial por falta de datos", dijo Berriel, quien dijo: "Esta ha sido una aprobación absolutamente exhaustiva y limpia".
Entre esas 200 correcciones el PP ha introducido en el PGO proyectos ya conocidos como el Canódromo, así como la construcción de un gran centro comercial en Tamaraceite Sur (de 66.000 metros cuadrados), la posibilidad de ampliación de las piscinas del Club Natación Metropole; la reconversión del edificio de Correos de Santa Catalina en un inmueble de oficinas: la inclusión de un supermercado en la parcela del Estadio Insular; o la modificación del Plan especial de Protección y Reforma Interior (Pepri) de Vegueta-Triana para permitir la instalación de bares y comercios en edificios protegidos.
Para Cardona, la aprobación de ayer supone un doble motivo de satisfacción, ya que se dota de cuerpo jurídico a la ordenación urbanística de la ciudad y por otro, vuelve a conceder al Ayuntamiento las competencias para ordenar el territorio que se habían perdido con la Ley de Medidas Urgentes. "Hoy la ciudad recupera las competencias urbanísticas que permitirán agilizar el planeamiento reduciendo en la mayoría de los casos, los procesos administrativos y consiguiendo, por tanto, una mayor agilidad en los procedimientos con la eliminación de figuras intermedias como los estudios de detalle, que a partir de ahora no serán necesarios y que anquilosaban muchos expedientes y actuaciones", concluyó Cardona.
Fuente: La Provincia

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