El Corredor Verde

Por: Pedro Domínguez Herrera

Desde siempre ha sido, que cuando se va a acometer una urbanización, que es programada estudiada y trazada; los vecinos de los aledaños, siempre se quejan, piden y nunca son contentados. A mi me da que esto se repite Allen de los mares. Empezaron con lo del Campo de Golf, para darle un cariz de inversión publica y comprar el terreno a buen precio. Al mismo tiempo a priori hacen que la gente hable y se cansen y, “saber por donde van los tiros”. Ahora después de hacer mil borrones en el papel y sabedores que se pedía un bucólico Corredor Verde, como la mas relevante petición vecinal,  se nos dejo en esa petición e incluso fue alentada, para que centrándonos en eso, no exigiéramos lo mucho que pudiéramos con la ley en la mano. Me refiero a la proporción establecida en las urbanizaciones para los espacios verdes. Me temo; siempre lo he dicho, lo del corredor verde es y será una buena intención que quedara para el recuerdo.

Con la pequeña actuación que se esta haciendo en los terrenos, ya se ve a las claras qué no se va a hacer; a más se ha empezado como siempre… se le da permiso a un proyecto y si el primero no da los metros estipulados para zonas verdes, los siguientes hacen lo mismo, con lo que en nuestro querido valle, me atrevo a decirlo, los espacios de esparcimiento  que tendrá, serán los de los aparcamientos al aire libre de las multinacionales. En estas urdidas manipulaciones, no se le pueden echar todas las  culpas a políticos, que suelen cambiar por legislatura. Estos son compromisos de décadas y de técnicos que gobiernan más de lo que pudiera parecer.      

                                             

 En el Articulo de Esteban: PROGRESO SI, PERO NO A CAMBIO DE NADA, da unas luces de lo que sería deseable por en bien de todos y hace hincapié, en que la oposición se mantiene en silencio; que van a  decir, si de aquellos barros son estos lodos. También nombra el Corredor Verde y apunta atinadamente lo de la carretera vieja a San Lorenzo. Amigo Esteban pidamos del barranco, las partes que no van a techar y a lo mejor nos dan algo, donde pueda brotar una tabaiba y un “Arpupú” (abubilla) pueda cimbrearse en las ramas de un tarajal. El terreno que  se puede lograr, es el margen de la autovía, que se tiene que dejar de reserva, para una posible ampliación de la via y tener nuestro espacio para el Corredor Verde “ prestado” hasta que  surja la necesidad de mas asfalto. Siento mucho ser tan derrotista y me sentiría feliz con equivocarme. Tiempo al tiempo