A hacer balance
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| Por: Tomás Galván Montañez |
Pocos jóvenes pueden tener la fortuna de entrar en “su mundo” incluso antes de haber iniciado los estudios que le acercarán a él. No sé el porcentaje de afortunados que gozan de tal oportunidad pues no he hecho encuesta alguna para averiguarlo, pero, desde luego, soy uno de esos afortunados.
Desde bien pequeño el periodismo me ha llamado. Quizá por mi afán de eterno curioso o por mis intenciones de investigar aun cuando el guion no lo exige. Por la razón que fuere, pero me apasiona.
El caso es que con la llegada del final de temporada es motivador hacer balance, y a mí me gusta hacerlo, pues así compruebo el punto en que estaba y el punto en que me encuentro ahora y las cosas que han podido cambiar. Es positivo hacerlo.
Decía al principio que soy de esos jóvenes que pueden tomar el pulso de la que podrá ser su forma de vida. Y es que gracias a Radio Tamaraceite Onda Parroquial he entrado a formar parte de “la familia de la radio”, ¡qué gran regalo!
El 15 de octubre de 2011 zarpaba el buque Standby. Cuatro singulares en un principio: Carla Rivero, Laura Hernández, Alejandro Díaz y quien escribe, Tomás Galván. Pero en unos meses se incorporarían dos más, Yaiza Domínguez y Bentejuí Duque. Cada uno con sus ideas y principios, con sus gustos y conflictos, pero con la ilusión y el deseo de trabajar para sacar un proyecto adelante. Nuestro proyecto. Poco a poco, personas reconocidas y anónimas han pasado por nuestros micrófonos para compartir sus historias: periodistas, presentadores, políticos, vecinos, bióloga, actores, sacerdotes. Todos tienen cabida.
Desde bien pequeño el periodismo me ha llamado. Quizá por mi afán de eterno curioso o por mis intenciones de investigar aun cuando el guion no lo exige. Por la razón que fuere, pero me apasiona.
El caso es que con la llegada del final de temporada es motivador hacer balance, y a mí me gusta hacerlo, pues así compruebo el punto en que estaba y el punto en que me encuentro ahora y las cosas que han podido cambiar. Es positivo hacerlo.
Decía al principio que soy de esos jóvenes que pueden tomar el pulso de la que podrá ser su forma de vida. Y es que gracias a Radio Tamaraceite Onda Parroquial he entrado a formar parte de “la familia de la radio”, ¡qué gran regalo!
El 15 de octubre de 2011 zarpaba el buque Standby. Cuatro singulares en un principio: Carla Rivero, Laura Hernández, Alejandro Díaz y quien escribe, Tomás Galván. Pero en unos meses se incorporarían dos más, Yaiza Domínguez y Bentejuí Duque. Cada uno con sus ideas y principios, con sus gustos y conflictos, pero con la ilusión y el deseo de trabajar para sacar un proyecto adelante. Nuestro proyecto. Poco a poco, personas reconocidas y anónimas han pasado por nuestros micrófonos para compartir sus historias: periodistas, presentadores, políticos, vecinos, bióloga, actores, sacerdotes. Todos tienen cabida.
Una idea que poco a poco ha ido creciendo con el apoyo inestimable de Radio Tamaraceite y el de los oyentes y seguidores en las redes sociales. Siempre han apostado por este proyecto y nos acompañan día a día. El agradecimiento es sincero.
Y si me lo permiten, sí quisiera centrar mi agradecimiento en el equipo de Standby. Desde un primer momento, los navegantes de Standby no dudaron en el proyecto que les proponía y no dejan de dar todo y más. Son geniales.
Esfuerzo, ilusión, trabajo y mucha confianza. Esos son los ingredientes de cada programa; salimos en antena con ganas de informar y entretener, dando cabida a todo y a todos siempre con respeto y verdad, defendiendo los pilares en los que creemos. Sin complejos. Hacemos lo que nos gusta mientras nos lo pasamos en grande. Cuando se pone alma, vida y corazón en algo, el resultado es siempre positivo.
En septiembre volveremos con novedades. Seguiremos con las mismas ganas de siempre intentado crear un buen ambiente cada fin de semana. Información, cultura, humor, sociedad, entrevistas, tertulia y música. Ya saben, los sábados a las 17.00h y los domingos a las 14.00h. ¿Dónde? En Radio Tamaraceite, la radio que habla y siente… como tú.
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